¿Sin ideas para cenar? Con una despensa bien surtida siempre hay una solución. Y la que nos propone el calendario Santos para el mes de junio es original y muy fácil de hacer: bocata agridulce de sardinas. Una lata de conservas, un sofrito de cebolla con piñones y pasas, unos limones confitados y un poco de miel harán la magia. ¿Suena bien, verdad?
Las recetas con productos en conserva son una buena idea para aquellos días en los que tenemos que improvisar una cena o comida, y buscamos opciones rápidas, sanas y ricas.
El toque exótico de esta propuesta lo ponen los limones confitados a la sal, un condimento típico de la cocina marroquí y de la gastronomía del Norte de África.
Ingredientes
- ½ limón confitado a la sal, o la ralladura de 1 limón
- 1 ramillete de perejil picado
- 1 cebolla roja grande
- 5 cucharaditas de aceite
- 70 gr. de piñones
- 70 gr. de pasas
- 12 sardinas en aceite grandes
- Sal y pimienta recién molida
- 2 cucharadas de miel de laurel
- Rúcula
- 6 bollos de pan
Preparación del relleno de sardinas agridulce
En una sartén, incorporamos el aceite y pochamos la cebolla roja picada en daditos muy pequeños. Durante unos 8 minutos cocinamos a fuego medio-bajo.
A continuación, subimos el fuego y agregamos los piñones. Dejamos que se tuesten durante unos 4 minutos.
Mientras tanto, abrimos el limón confitado y extraemos su pulpa. La picamos en daditos pequeños. Mezclamos la pulpa (o la ralladura de limón) con las pasas. Llevamos el fuego a temperatura media-baja de nuevo e incorporamos los limones confitados y las pasas a la sartén.
Aplastamos un poco las sardinas con un tenedor y las introducimos en la sartén. Mezclamos bien todos los ingredientes. Por último, añadimos las dos cucharadas de miel y removemos. Rehogamos durante unos minutos.
Retiramos del fuego, añadimos el perejil picado y reservamos en un cuenco.
El montaje del bocadillo
Con nuestro relleno ya listo, solo nos queda la presentación final. Abrimos el pan por la mitad y lo tostamos en la sartén en la que hemos preparado el relleno. Lo hacemos durante unos minutos, a fuego alto, por el lado de la miga. Así conseguiremos que quede más jugosito y crujiente. Además absorberá parte de los sabores que quedan en la sartén.
Incorporamos una capa de hojas de rúcula picada, que con su toque fuerte aportarán un interesante contrapunto al relleno agridulce.
Añadimos unas cucharadas de relleno y cubrimos con la otra mitad de pan.
Para nuestros bocadillos, podemos comprar un pan de hamburguesa o, si nos apetece hornear y realizar una receta más elaborada, preparar el que te proponemos a continuación, con semillas y pipas. ¡Irresistible!
Ingredientes para los bollos de pan (6 bollos de 140 gr. aproximadamente)
- 500 gr. de harina de panadería
- 6 gr. de levadura fresca o 2 gr. de levadura seca
- 10 gr. de sal
- 300 ml de agua tibia
- 35 gr. de mantequilla ablandada
- 1 huevo (para pintar los panes)
- 1 cucharada de leche (para pintar los panes)
- Para decorar: semillas de sésamo, semillas de amapola, pipas de calabaza
Preparación de los bollos de pan
En un cuenco grande, mezclamos la harina tamizada con la levadura fresca frotándola entre las manos. Añadimos sal y mezclamos.
Vamos incorporando el agua suavemente, sin dejar de remover. Mezclamos hasta obtener una masa.
Continuamos removiendo y añadimos, poco a poco, la mantequilla, cortada en pequeños trocitos. Mezclamos hasta que la masa haya absorbido toda la mantequilla.
Durante unos 15 minutos, amasamos. Tras este tiempo realizamos la prueba de la membrana. Cortamos un pedazo de masa del tamaño de una nuez. La cogemos entre los dedos y estiramos hacia afuera, con el objetivo de conseguir una fina película. Estiramos poco a poco. Si la preparación está correctamente amasada, podremos realizar este proceso sin dificultad, y sin romper la masa, que adquiere la similitud de un velo o de una membrana translúcida.
Si vemos que la masa no pasa la prueba, dejamos reposar unos 10 minutos y realizamos un amasado de unos 2 minutos.
Damos forma de bola a la masa y la dejamos toda la noche en la nevera, en un cuenco ligeramente aceitado y cubierto con un paño de algodón.
Al día siguiente, retiramos la masa del frigo 20 minutos antes para que se vaya atemperando. Realizamos 6 porciones de unos 140 gr. Les damos forma de bola y las aplanamos un poco con la mano, para que no crezcan mucho. Las dejamos levar, cubiertas y a temperatura ambiente, durante unos 45-60 minutos.
Mientras tanto, vamos precalentando el horno a 210º con calor arriba y abajo.
Cuando falten entre 10 y 15 minutos para que finalice el levado, metemos en la parte baja del horno un recipiente refractario con agua caliente.
Si queremos que los panes conserven un color blanquecino, los pintamos con agua. Si los preferimos dorados, con la yema de un huevo con leche.
Cubrimos con las semillas de nuestra elección e introducimos en el horno durante unos 18-20 minutos. Tras los primeros 10 minutos, retiramos del horno el recipiente con agua.
Cuando veamos que los bollitos estén horneados, los sacamos y los dejamos enfriar sobre una rejilla.
Nuestros bocadillos ya están listos y solo nos queda disfrutarlos. En una relajante cena, en un picnic campestre o al borde del mar. ¡Tú eliges! Si quieres ver más imágenes del proceso de elaboración, puedes hacerlo en el blog Sweet & Sour. Para consultar otras recetas publicadas en nuestro blog, haz clic aquí.