Las cocinas de madera son cálidas, acogedoras, confortables y, además, están de plena tendencia. En estancias de estilo rústico aportan un toque clásico y distinguido, mientras que en las de diseño contemporáneo el encanto del acabado natural y la personalidad de las vetas crean un interesante contraste con las formas puras y minimalistas.
No nos referimos únicamente a las cocinas de madera natural maciza o chapa, materiales exclusivos y muy atractivos, pero costosos, y que exigen un gran mantenimiento. Los muebles de cocina estratificados y laminados permiten ofrecer una gran gama de acabados con la apariencia y textura de la madera, pero sin los inconvenientes de este material.
Otra ventaja de las cocinas de madera es su versatilidad y variedad: cerezo, pino, roble, cedro, nogal… Hay múltiples modelos para elegir, en función de los gustos y preferencias, y también de las características de cada espacio. Como el blanco o el negro, los tonos madera combinan con todo, lo que facilita el diseño del interiorismo.
Si buscas inspiración para tu cocina de madera, aquí te mostramos algunas imágenes e ideas:
Cocina blanca y madera: luminosa y confortable
Las cocinas en blanco resultan luminosas y ligeras, pero pueden pecar de cierta frialdad o minimalismo excesivo. La madera, por el contrario, aporta calidez y contribuye a crear espacios acogedores. La combinación de ambas tonalidades es siempre un acierto, y prueba de ello es esta cocina blanca y madera con isla, que irradia confort y elegancia.
Otro buen ejemplo es la foto que vemos arriba, en la que la gama cromática se reduce al diálogo establecido entre el acabado Fresno y el color blanco (presente en la isla, los taburetes, la campana, la placa de inducción, el fregadero y el grifo). Parte de la pared se revistió con tablas de pino lacadas también en blanco lo que contribuyó a dar un toque rústico a esta cocina moderna. Un efecto similar es el que logran las cocinas de madera blanca, en las que, a pesar de la pintura clara, se mantienen la textura y calidez del material natural.
La combinación blanco y madera está presente en cocinas de todos los estilos, pero quizá brille especialmente en las de estética nórdica. En estos casos, los muebles en blanco se intercalan con detalles en acabados como el Olmo Claro. Se trata de espacios luminosos y acogedores, que transmiten además mucha serenidad.
Cocina negra y madera: sofisticación sin renunciar a la calidez
En las cocinas negras la madera también permite dar un contrapunto de calidez a espacios más sofisticados y contemporáneos.
Por el contrario, si lo que predomina es la madera, los detalles en colores oscuros aportan una apariencia más chic y moderna, como ocurre en esta cocina de madera con encimera negra. Así, como ya vimos en la combinación de blanco y madera, se logra aunar lo mejor de dos tonalidades y acabados.
Cocina gris y madera: pura elegancia
Para los que huyen de la rotundidad del blanco o el negro, la combinación de cocina gris y madera puede ser todo un éxito. Además, la gama del gris incluye múltiples tonalidades, desde las más claritas (como Arena o Perla) e intermedias (como Visón o Cashmere) hasta las más oscuras (como Grafeno o Antracita). Lo que tienen todas en común es que, junto a la madera, generan ambientes equilibrados y elegantes.
Cocinas clásicas y rústicas de madera: aires de antaño
En los espacios de corte más tradicional, la combinación de muebles de madera, encimera de mármol y azulejos en el suelo es muy habitual. De hecho, las cocinas en chapa se ven mucho más en estancias grandes y luminosas de casas de campo que en exiguos pisos urbanos.
En el caso de buscar una atmósfera señorial puede ser buena idea decantarse por maderas oscuras como el Roble Fumé o el Nogal. Es posible incidir en la estética clásica con muebles con molduras y vitrinas, pero optar por un diseño más contemporáneo en los frentes creará ambientes con mucha personalidad. No hay que olvidar que el estilo rústico moderno está muy en boga en la actualidad.
Cocinas con isla de madera: calor de hogar
Cuando la cocina comparte una única estancia con el salón, la isla de madera puede ser el elemento idóneo para crear una transición gradual entre los distintos ambientes. Esto queda muy patente en el proyecto de la foto superior, donde la isla es un espacio de trabajo, pero también incluye elementos más propios de los momentos de ocio como una librería.
Cocinas con barra de madera
La madera suele ser un material indispensable en el comedor, y por lo tanto es habitual que la barra, que permite ofrecer un espacio de office en cualquier rincón, recurra a este acabado. La barra puede integrarse en la isla o península, algo muy frecuente en las cocinas abiertas.
Pero también puede ser la clave para poder desayunar a diario en cocinas muy reducidas. En este caso, vemos cómo la barra contra la pared permite aprovechar el espacio frente a los muebles, y la madera contribuye a hacer el ambiente más confortable y agradable.
Cocinas de madera pequeñas pero con mucho encanto
Aunque es cierto que los acabados en madera suelen resultar más densos y voluminosos visualmente, también pueden dar mucho juego en estancias pequeñas. La clave está en elegir tonos claros, y en combinarlos con colores luminosos. Una buena idea consiste en emplear las tonalidades madera en los muebles bajos, y optar el blanco en los superiores. Así se logra un ambiente cálido y confortable, pero no recargado.
Si buscas una cocina de madera para tu vivienda, no dudes en contactar con nuestro equipo de interiorismo. Estaremos encantados de asesorarte sobre los distintos tipos de acabados disponibles y cómo aplicarlos en tu proyecto teniendo en cuenta tus gustos y hábitos, así como las características de tu casa.